Pro TIP: La mejor respuesta a esta pregunta es dar un ejemplo de la situación, el resultado de esa situación y lo que aprendiste a partir de ella.
Aquí te presento algunos puntos clave y ejemplos para responder a la pregunta de entrevista «¿Puede trabajar bajo presión? Dé un ejemplo»:
Puntos Clave a Considerar:
- Define brevemente qué significa para ti trabajar bajo presión: Demuestra que entiendes el concepto. No te limites a decir «sí».
- Utiliza el método STAR: Este método (Situación, Tarea, Acción, Resultado) te ayuda a estructurar tu respuesta de manera clara y concisa.
- Sé específico: Evita generalidades. Cuanto más específico sea tu ejemplo, más creíble serás.
- Enfócate en resultados positivos: Describe cómo manejaste la situación y cuál fue el resultado positivo que obtuviste.
- No te quejes: Evita sonar como si estuvieras sufriendo o quejándote de la situación. Muestra una actitud positiva y resiliente.
- Relaciona tu respuesta con el puesto: Intenta conectar tu ejemplo con las responsabilidades del puesto al que te postulas.
Recuerda: Adapta estos ejemplos a tu propia experiencia y al puesto al que te postulas. Lo importante es demostrar que tienes la capacidad de mantener la calma, ser organizado y obtener resultados positivos incluso en situaciones de presión.
Ejemplo completo a la pregunta
Sí, puedo trabajar bajo presión de manera efectiva. Soy capaz de mantener la calma y la concentración en situaciones desafiantes, priorizar tareas y enfocarme en la resolución de problemas. Tengo la capacidad de trabajar de forma independiente y como parte de un equipo para cumplir con los objetivos bajo presión.
Un ejemplo concreto de mi capacidad para trabajar bajo presión fue durante mi anterior trabajo en mi empresa anterior. En ese entonces, estaba trabajando en un proyecto importante con un plazo ajustado. El equipo se encontró con varios obstáculos inesperados, lo que generó un alto nivel de estrés.
Para afrontar la situación, implementé las siguientes medidas:
- Mantuve una comunicación clara y constante con el equipo. Informé sobre el estado del proyecto, los desafíos que enfrentábamos y las soluciones que estábamos implementando.
- Priorice las tareas y establecí plazos realistas. Me aseguré de que todos los miembros del equipo comprendieran su rol y las responsabilidades para cumplir con los objetivos.
- Delegué tareas de manera eficiente. Asigné tareas a los miembros del equipo según sus habilidades y experiencia para optimizar el rendimiento.
- Mantuve una actitud positiva y motivadora. Reconocí el esfuerzo del equipo y celebré los logros, incluso en momentos difíciles.
Gracias a estas medidas, el equipo pudo superar los obstáculos y entregar el proyecto a tiempo y con éxito. Esta experiencia me enseñó la importancia de la comunicación, la organización y la actitud positiva para trabajar bajo presión.
Además de este ejemplo, puedo mencionar otras habilidades que me ayudan a trabajar bajo presión:
- Capacidad para mantener la calma y la concentración.
- Habilidad para tomar decisiones rápidas y efectivas.
- Flexibilidad para adaptarme a cambios inesperados.
- Resiliencia para afrontar los desafíos y superar obstáculos.
- Enfoque en la búsqueda de soluciones.
Estoy seguro de que puedo aportar estas habilidades a su empresa y contribuir al éxito de su equipo.
En resumen, soy una persona capaz de trabajar bajo presión de manera efectiva. Tengo la experiencia, las habilidades y la actitud para afrontar situaciones desafiantes y cumplir con los objetivos.